El Romanticismo es el producto de una profunda crisis cuyas manifestaciones abarcan lo político (disconformidad con el Antiguo Régimen y con la Burguesía), lo filosófico (oposición al Racionalismo), y lo estético (rechazo de las formas neoclásicas).
Se desarrolla entre el último tercio del siglo XVIII y la primera mitad del XIX, en época de transformaciones políticas, tecnológicas y económicas.
Se desarrolla entre el último tercio del siglo XVIII y la primera mitad del XIX, en época de transformaciones políticas, tecnológicas y económicas.
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